En este trabajo se sugiere que Chile debe adoptar una estrategia de desarrollo renovada de largo plazo que conduzca a un desarrollo inclusivo con equidad creciente, a fin de superar los efectos no deseables del tipo de crecimiento económico vigente, esto es, la persistencia de una inaceptable desigualdad de los ingresos, de los niveles y de la calidad de vida, así como la creciente sensación de exclusión social. Para abordar estos temas, primero se muestra la evolución de la desigualdad en las dos últimas décadas. A continuación, se analizan las características de la estructura productiva de la economía chilena, que se consideran un factor determinante de la desigualdad. A partir de este análisis, se proponen los lineamientos generales de una estrategia renovada que incluya explícitamente los diferentes estratos productivos y sociales del proceso de crecimiento. Finalmente, se señalan las áreas de política que serían clave para lograr un desarrollo inclusivo